159 kilómetros de tortuoso y apacible cauce separan la desembocadura del río Navia, en la villa homónima, con su nacimiento en la aldea gallega de Busnullán.

Entre medias, sus aguas riegan numerosos concejos del occidente asturiano. Como el de Illano, que nos regala alguna de las estampas más bucólicas de todo el Parque Histórico del Navia, comarca de la que forma parte junto con Grandas de Salime, Pesoz, Boal, Coaña, Tapia de Casariego, El Franco, Villayón y Navia.

 

 

La ruta del Puente Colgante acerca al caminante a este paisaje idílico sobre el embalse de Doiras, un remanso de paz y silencio perfecto para empaparse de toda la esencia del occidente de Asturias. ¿Te animas a recorrerla?

Todo lo que debes saber antes de calzarte las botas

 

La ruta del Puente Colgante (PR. AS-113) es un recorrido de dificultad media (por el desnivel) y de 13 kilómetros de longitud (ida y vuelta) en un trayecto circular que consta también de una parte lineal.

Tiene un desnivel positivo de 604 metros aproximadamente y la duración es de entre 4 y 5 horas, un tiempo estimado que depende del ritmo que lleves y de las paradas que hagas, pudiendo ser incluso menor si tu velocidad acostumbra a ser alta.

El firme, en general, es bueno, y aunque no entraña ningún peligro, no es aconsejable para niños muy pequeños debido al desnivel, pero sí para aquellos más mayores y acostumbrados a caminar.

Si tu intención es portear también has de tener en cuenta esos 604 metros de desnivel positivo, y hacerlo solo si estás físicamente preparado para ello, ya que puede ser realmente cansado.

A causa de la pendiente, los baches y la estrechez de algunos tramos no es una ruta apta para sillita infantil ni para personas con movilidad reducida que utilicen sillas de ruedas u otros elementos de ayuda, y sus características tampoco permiten que se pueda hacer bicicleta.

¿Quieres que tu perro te acompañe? Aunque la ruta del puente colgante transcurre por el entorno del río Navia, durante el camino no hay mucha disponibilidad de agua (solo un par de arroyos, la fuente del lavadero de Lanteiro y el propio río).

Además, el acceso a ella desde la parte del puente es algo complicado y no todos los perros serán tan intrépidos como para lanzarse al embalse, así que lo mejor es que lleves una buena provisión de agua por si acaso.

Ruta del Puente Colgante, caminando sobre el río Navia

 

La ruta del Puente Colgante parte del área recreativa de Folgueiróu, ubicada en el kilómetro 41 de la carretera AS-12 a su paso por el concejo de Illano.

Esta área cuenta no solo con parque infantil y merendero, sino también con piscina descubierta (abierta solo en verano), oficina de turismo, un Centro de Interpretación de la Naturaleza, bar, campo de fútbol, bolera, campo de tiro y un espacio de pernocta para autocaravanas y furgonetas.

Para comenzar la ruta pasaremos el torno de acceso y desde allí nos dirigiremos hacia la piscina, bordeándola por la derecha. A continuación cruzaremos la pista de tierra hacia otra que tenemos justo delante e iniciaremos un descenso constante hacia la orilla del embalse de Doiras.

Serán 3,5 kilómetros en los que pasaremos de una altitud de 481 metros a 120 metros (sobre el nivel del mar), una bajada bastante potente aunque muy sencilla ya que la pista es ancha y está en muy buen estado.

Bosques de pinos, eucaliptos, robles, castaños y abedules nos acompañarán durante todo el camino, pero también infinidad de especies de helechos y de brezo. Este último tiñe en verano el paisaje de un color púrpura intenso y de un aroma muy dulce que lo inunda todo.

También podremos ver alcornoques y madroños en las zonas más bajas, característicos del clima más medtiterráneo que reina en la parte inferior del valle.

Las sierras de Carondio, la Bobia y San Roque nos vigilarán desde las alturas en la margen contraria del embalse, con picos de más de 1000 metros.

Más adelante llegaremos a una bifurcación que indica “Puente colgante/Illano”, donde tendremos que seguir por la izquierda en dirección hacia el puente colgante. Es importante que no te olvides de este cruce, ya que a la vuelta sí que tendremos que llegar hasta aquí de nuevo y tomar dirección “Illano”.

Cada vez iremos viendo el río más cerca, y pronto aparecerá a lo lejos el pintoresco e idílico puente colgante de hierro que da nombre a la ruta.

Cuando llegues a este punto te animo a que lo recorras con calma, despacio, disfrutando de la brisa que mece el puente en un vaivén constante, y del silencio que todo lo envuelve. De todas formas, volverás a pasar por aquí en un rato, así que puedes elegir cuándo parar, ¡o parar a la ida y a la vuelta!

Luego comenzaremos a ascender otra vez (hasta los 270 metros de altitud aproximadamente) en dirección a Lantero, una pequeña aldea situada en la ladera de la montaña a unos 100 metros sobre el río.

Allí puedes visitar el lavadero que está a la entrada del pueblo y la ermita de San José que se encuentra en el otro extremo, además de deleitarte con las maravillosas vistas de los cultivos de vid colgando hacia el valle del Navia.

Desde aquí bajaremos otra vez por el mismo camino hasta llegar al puente colgante, y luego seguiremos hasta el cruce señalizado por donde pasamos antes, pero esta vez debemos girar a la izquierda hacia “Illano” y comenzar a subir.

El ascenso a partir de este punto es bastante pronunciado, sobre todo hasta Illano, ya que habremos de salvar en poco más de 1 kilómetro todo el desnivel que descendimos antes. De todas formas, aunque es un poco cansado, si has llegado hasta aquí lo podrás hacer sin problema con más o menos paradas según tu condición física.

De pasado y presente eminentemente agrícola y ganadero, Illano se caracteriza por sus casas de piedra oscura y tejados de pizarra, arquitectura típica del occidente asturiano.

Pasear por sus intrincadas calles observando con atención las casas, los hórreos, las paneras y los cabazos es un viaje al pasado. De hecho, verás que la mayoría de esas casas se encuentran ya deshabitadas…

Sigue las indicaciones que te llevarán hasta la carretera AS-12, desde allí hacia la parte más alta de Illano y posteriormente hasta la aldea de Cimadevilla, el último pueblo antes de llegar al área recreativa de Folgeiróu.

* Por el camino es posible que te topes con algún truébano o trobo (troncos cilíndricos de madera -habitualmente de castaño- que contienen panales de abejas).

Antes de llegar al punto final de la ruta del Puente Colgante has de tener mucha precaución (sobre todo si vas con niños o perros), ya que hay que transitar durante alrededor de 30 metros por la carretera y puede ser peligroso.

Superado este cortísimo tramo ya te podrás relajar, ¡porque has completado el recorrido!

Si es verano quizás te apetezca darte un chapuzón en la piscina o tomar algo en el bar para recobrar fuerzas. Si no, puedes simplemente sentarte en una de las mesas y disfrutar del área recreativa de Folgueiróu durante un rato antes de emprender tu camino de vuelta a casa.

¡La Ruta del Puente Colgante de Illano te acerca a la esencia del occidente de Asturias! ¡Si te ha gustado este post, compártelo en tu Facebook!


Texto y fotos: Sandra F. Sánchez ©asturiasprestosa.com